sábado, 19 de abril de 2014

LA RESACA

La crisis del gobierno de coalición en Andalucía ha dejado una suerte de resaca, un runrún en la cabeza de unos y otros que nos indica que va a ser difícil volver a la normalidad. No voy a volver sobre lo dicho -en la última entrada del blog- e insistir en la sobreactuación de casi todos en este asunto. Tampoco quiero pasar ahora por más susanista que Susana, pero estoy convencido de que mi actuación en esta crisis se habría parecido bastante -con algún matiz- a la de la Presidenta de la Junta de Andalucía de haber estado en su lugar. Lo que me llama la atención de la post-crisis son ciertos análisis hechos desde sectores progresistas para justificar la actuación de la Consejera de Fomento y Vivienda en estos hechos.

Dos artículos -uno de Javier Gallego y otro de Juan Torres- publicados en estos días sugieren abiertamente -más claramente el segundo- que la causa de la crisis en la coalición es la negativa de Susana Díaz a asumir la desobediencia civil como forma de gobierno. Se lleva así el debate a un terreno resbaladizo en el que se confunden, no sé si conscientemente, las actitudes que pueden tener ante un problema social los individuos y los gobiernos.

La desobediencia civil es una herramienta de lucha ciudadana contra situaciones de injusticia amparadas por la ley. No soy un experto en el tema, pero creo que la definición que puede verse aquí es más que aceptable. La desobediencia civil es una forma legítima de lucha contra situaciones de opresión o injusticia derivadas del cumplimiento de leyes formalmente democráticas. La actitud de quienes, en situación de absoluto desamparo, optan por ocupar ilegalmente una vivienda cerrada propiedad de un banco me parece perfectamente legítima -con independencia de lo que cada cuál haríamos en situaciones parecidas-. Se satisface así la necesidad de vivienda de estas familias -derecho fundamental- y se denuncia públicamente una situación profundamente injusta: que entidades bancarias que han recibido grandes sumas de dinero público mantengan cerradas viviendas de su propiedad y se nieguen siquiera a destinarlas a alquiler social. Y de paso, y no es un tema menor, se denuncia que los poderes públicos no metan en cintura a estas entidades bancarias.

No se trata, por tanto, de cuestionar la actitud de quienes ocupan las viviendas. Estas personas hacen un ejercicio de desobediencia civil perfectamente comprensible; es a los ciudadanos y ciudadanas a quienes corresponde, individual o colectivamente, adoptar este tipo de iniciativas. Los gobiernos, por contra, no pueden ejercer este tipo de acciones, por mucha justicia que se defienda con ellas.

Es legítimo que la ciudadanía, perjudicada por leyes que considera injustas y que no puede cambiar, opte por la desobediencia. Bien distinta es, en cambio, la actitud a adoptar por un gobierno ante la misma situación. Los gobiernos democráticos se sustentan en mayorías parlamentarias y son los parlamentos quienes ostentan el Poder Legislativo. Por tanto, ¿es lícito que los representantes del pueblo, autores de las leyes, las incumplan? ¿Tiene sentido que quien ostenta el poder para hacer normas promueva su incumplimiento? En mi opinión, no. Su deber, en todo caso, es impulsar cambios legislativos para que Justicia y Legalidad sean cosas los más parecidas posible. Y es lo que ha hecho el gobierno de coalición andaluz, por ejemplo, con la Ley de Función Social de la Vivienda. Esa es la forma de rebelarse contra la injusticia cuando se está en el gobierno, y no desobedecer leyes como parece desprenderse de las opiniones que se ven en estos días.

Cierto es que cambios legales como el que se ha citado se han visto cercenados -desgraciadamente- por los recursos del Gobierno de la Nación en los Tribunales de Justicia. ¿Hay que desobedecer entonces las resoluciones de los tribunales? Entraríamos así en un camino más peligroso aun. Si no aceptamos estas resoluciones, ¿cómo defender el triunfo de la Marea Blanca en Madrid, que ha paralizado por vía judicial la privatización de hospitales públicos? ¿Cómo criticaríamos el incumplimiento, por el Ministerio del Interior, de la Ley de Extranjería con las "devoluciones en caliente"? La frustración que sentimos por ver frenada la aplicación de esta ley con recursos espurios no puede descargarse instando al incumplimiento de las resoluciones judiciales.

No deja de ser lamentable que nadie haya puesto el foco en la actuación del PP -especialmente el PP andaluz-, responsable de que esta ley no esté en vigor -con lo que se evitarían situaciones como la que ha dado lugar a esta crisis-. Este partido ha permanecido como espectador en todo este asunto, más preocupado por disfrutar de las discrepancias de los socios de gobierno que de resolver los problemas de los ciudadanos. Esa es su escala de prioridades. Los demás, aparte de discrepar sobre maneras de hacer -civilizadamente, evitando el debate twittero de brocha gorda-, nos deberíamos aplicar a denunciar ante la ciudadanía la actitud de quienes han tomado partido por la defensa incondicional de los intereses de los bancos frente a los de los ciudadanos y ciudadanas andaluces.

3 comentarios:

  1. No puedo estar de acuerdo contigo porque discrepo en la raíz de tu argumentación, que es partir de que IU realizó un acto de desobediencia civil o de que su actuación no fue legal. La acción de IU, como hemos repetido hasta la saciedad, con argumentación jurídica, fue legal. No puedo, por tanto, compartir lo que planteas. Si nuestra acción hubiese sido ilegal ¿a qué nos devuelve Susana Díaz las competencias? ¿por qué no cesó a la Consejera? ¿es lógico que nos las retire y a las 12 horas nos las devuelva? Por otra parte, es evidente que ninguno de los dos socios estamos cómodos en el co-gobierno. Creo sinceramente que la cúpula del PSOE poco o nada tiene que ver con una militancia estupenda que no se merece... http://blogs.publico.es/dominiopublico/9755/felipe-gonzalez-y-zp-tienen-razon/ Gracias por el artículo y por tu actitud, siempre dispuesta a ver los grises y en defensa de lo que crees. Como digo siempre, el PSOE necesita muchos como tú...

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    1. Para empezar, quiero dejar claro que formo parte del sector del PSOE que vé con buenos ojos el pacto de gobierno, que creo que gobernar juntos, aunque difícil, nos hace mejores al PSOE y también a IU. Por tanto, no pretendo alimentar los argumentos a favor de elecciones anticipadas ni de grandes coaliciones, que quede claro.

      Dicho esto, como sabes, no emito opiniones sin documentarme (me puedo equivocar, obviamente). Y en este caso, como siempre, consulté todos los argumentos que aportaron tus compañer@s sobre el asunto. Y así y todo, me reitero en mi opinión. Lo que se ha presentado como base jurídica de esta actuación (aparte de que las normas reguladoras en asignación de viviendas públicas permiten atender situaciones de emergencia, más allá de listas de espera ordinarias) es el auto judicial del desalojo. En este auto tan solo se conmina a la administración competente (la Junta de Andalucía) a "proveer lo necesario" en los casos de desalojo de familias en riesgo de exclusión social y/o con menores a cargo. Pero no dice en ningún sitio que eso suponga prioridad absoluta con respecto a cualquier otro demandante de vivienda en la misma situación. Ya sabemos que no todos los 10.000 ó 12.000 demandantes de vivienda protegida están en riesgo de exclusión, pero, ¿podemos asegurar que no hay ni una sola familia, aparte de las de la corrala, en esta situación? Ojalá fuese así, pero no lo creo, y las informaciones que he visto por ahí dan una cifra de alrededor de 300 casos. ¿Por qué los desalojados de Utopía tienen que tener prioridad sobre todos ellos? No se trata de enfrentar a pobres con pobres, como se ha dicho, sino de respetar un criterio objetivo en la asignación de vivienda pública.

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    2. En cuanto a lo del cese de la Consejera, creo que es evidente que si se hubiese producido se habría roto el pacto. Será por eso que no se hizo. Y yo te puedo devolver alguna pregunta en este contexto: si vuestra actuación fue legal siempre, ¿por qué se pasó de 20 familias a 17 y después a 8 (y lo de 20 no me lo invento, aquí tienes declaraciones de Cayo Lara, que no son las únicas: http://www.europapress.es/andalucia/sevilla-00357/noticia-cayo-lara-expresa-apoyo-iulv-ca-realojos-corrala-utopia-20140410085511.html)?

      No sé si soy el único socialista que ha criticado (moderadamente o como quieras llamarlo) la actuación de mi partido en este asunto. Lo que sé es que todavía no he escuchado a nadie de IU cuestionar ni un detalle de su actuación, ¿no merece ni un mínimo de autocrítica este asunto? ¿si pasamos de 20 familias a 8, será que alguien se equivocó? ¿es un procedimiento legal y ordinario repartir llaves de viviendas públicas de noche en una plaza? Hombre, yo creo que también deberíais plantearos si habéis hecho algo mal, yo lo hago con frecuencia, como sabe cualquiera que lea este blog (sin falsas modestias ... ).

      Y luego, con esto de las teorías conspiranoicas de que esto se hace para preparar el terreno a la ruptura y la "gran coalición" en 2015 ... Yo espero que no se produzca, pero te puedo hacer el planteamiento recíproco, ¿puede ser esto una provocación premeditada del sector de IU crítico con el pacto para forzar la ruptura y volver a la política de la coalición en la legislatura 1994-1996? Puestos a ser conspiranoicos, yo afirmo que es igual de probable una cosa y la otra (solo hay que ver los tweets de regocijo de much@s de tus compañer@s en esos días, que tú conoces).

      Por útlimo, un detalle. Hablo de desobediencia civil en referencia al artículo de Juan Torres (que tú conoces). Aunque no la nombre, lo que inspira su artículo es eso, como en este párrafo:

      "Incluso santo Tomás decía que 'si la ley resulta gravemente injusta no solo no debe obedecerse sino que ni siquiera merece propiamente el nombre de ley'”. No pongo más citas porque me extendería todavía más, pero se cita a Rosa Parks, a Jesucristo ... como ejemplos de lo que debe hacer la administración andaluza en esta cuestión.

      Bueno, perdona por la parrafada, pero es que hay que argumentar. Y discutir con personas como tú es gratificante por que lo hacemos con argumentos, como debe ser, que esto no es como ser del Madrid o del Barça.

      Gracias por el comentario, y sobre todo, perdona si en algún momento el tono puede parecer agresivo por vehemente. Un abrazo.

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